Inseguridad: volvió la "comisaría rodante" al castigado barrio 7 Jefes
El Ministerio de Seguridad instaló nuevamente la posta policial que habían retirado hace 5 meses. En ese lapso “aumentaron los robos”, denuncian los vecinos. Está en Vélez Sársfield y Pedro Ferré.
Inseguridad: volvió la "comisaría rodante" al castigado barrio 7 Jefes
Tras el insistente reclamo de los vecinos, volvió este viernes luego de cinco meses la garita policial fija al barrio 7 Jefes. La misma había sido retirada a fin de año. Esto despertó la preocupación de los vecinos ante el incremento de los hechos delictivos. La nueva posta policial es una “comisaría rodante” de cuatro ruedas.
“El gobierno (provincial) anterior tenía un problema con el pago de los contratos de los contenedores utilizados como posta policial, por ese motivo se había retirado de este lugar”, dijo la secretaria de Seguridad provincial, Virginia Coudannes, este viernes en la intersección de Vélez Sársfield y Pedro Ferré, mientras instalaban la nueva “comisaría móvil”. “Es un punto estratégico del barrio”, consideró.
La dependencia es un trailer con eje de cuatro ruedas sobre el que se montó una estructura metálica habitable que funcionará como comisaría o posta policial. Tiene una escalera para ingresar al interior, en donde está compartimentada con una salita y un baño. En su exterior tiene un techo de chapa con caída a un agua y dos estructuras para instalarle una garrafa de gas y un aire acondicionado (todavía no los tiene).
Presencia. Esta mañana había agentes de a pie y patrulleros dando vuelta por el barrio. Flavio Raina.
Por el momento la nueva “comisaría rodante” fue trasladada a ese punto del barrio 7 Jefes, junto a la ciclovía, a donde este viernes por la mañana había en el lugar apostadas dos mujeres policía. Pero en el interior de la dependencia no había ni una silla, estaba vacía. “Hoy vendrán a verificar la instalación del suministro energético y de agua, para que funcione el baño, para hacer las conexiones necesarias”, explicó la secretaria de Seguridad.
“Tuvimos reuniones con la vecinal para acordar la instalación de esta dependencia que será más que nada un lugar de descanso para los policías caminantes que recorren el barrio, la Costanera y la zona de bulevar (Gálvez)”, dijo Coudannes, y “también poder pensar junto a los vecinos otras actividades, que sea un espacio de articulación”.
Signos de otro hecho de violencia en el barrio. Gentileza.
Satisfacción
“Esto es fruto de las conversaciones que mantuvimos con las autoridades”, dijo Lorenzo Castella, un vecino que acompañó la instalación de la comisaría móvil y agradeció a las autoridades presentes. “Estamos contentos porque nos escucharon”, agregó. Esto “significa que vamos a estar más tranquilos con la presencia policial en el barrio”.
Dos vecinos de muchos años en el barrio, que viven en la esquina de Pedro Ferré y Vélez Sarsfield, también expresaron su satisfacción por el regreso de la posta policial. “Nosotros siempre les dábamos agua fresca, ellos se acercaban a pedirnos, estaban siempre acá los policías”, contó Ricardo. “Ahora esperemos que la cosa se calme, porque se puso bravo el barrio”, agregó. “Al vecino de acá en frente que se mudó hace un mes al barrio le entraron a robar la primera noche que vino a vivir. Ahora puso cámaras, pero no se puede vivir así”, reclamó.
Asaltados. Esta vivienda fue víctima de la delincuencia. Gentileza.
Otra vecina de la cuadra siguiente se mostró preocupada por los conflictos interpersonales entre los habitantes del asentamiento social “La Carbonilla”, montado en los terrenos ferroviarios del Belgrano Cargas, en el lugar. La nueva “comisaría rodante” fue emplazada justamente en el acceso al asentamiento. “Esperemos que puedan atender también a esta gente, y que los que metieron presos por revoltosos, no vuelvan al barrio, para que podamos vivir tranquilos”, dijo Rosa.
Seguidilla
Hace unos días atrás, El Litoral dio cuenta de esta seguidilla de hechos de violencia en el barrio. "La verdad que estos hechos se redujeron notablemente, pero ahora hará cosa de 30 a 40 días que se empezaron a incrementar y la situación se está recrudeciendo", advirtió Mario Debarbora, otro representante de la Vecinal.
“Acá tenemos una seguidilla de hechos delictivos de todo tipo”, dijo el vecinalista del barrio, Martín Pautasso, quien compartió los registros en video de varios robos y asaltos perpetrados en viviendas particulares y en la vía pública. En uno de ellos se observa a un sujeto ingresando a un garaje y llevándose luego una bicicleta. En otro, dos personas a bordo de una moto que interceptan a dos mujeres en otra moto, las tiran al suelo y las asaltan. Y un tercer video es el registro de una reja dañada para ingresar a una vivienda del barrio, desde la que se llevaron varias pertenencias. “Esperemos que con esta posta policial la cosa se calme un poco”, dijo.
Una de las víctimas de estos hechos de violencia y robo fue Eduardo, quien padeció un calvario, porque el hombre que entró a su casa lo intentó un día antes, como no pudo regresó al día siguiente y concretó el “achaco”. “Vino justo cuando yo salí a buscar a mis hijos, de acuerdo a los videos de seguridad estuvo más de una hora adentro. Se llevó de todo: televisor, ropa, mochila, electrodomésticos, parlante, de todo”, dijo Eduardo. “Tuve que reforzar las rejas rotas y la sorpresa fue al día siguiente, cuando volvió a venir y siguió robando con total impunidad: se llevó celulares, una bordeadora y otras cosas. No podía creerlo”.
“Según los registros de los vecinos siguieron robando en el barrio y ayer lo atraparon. Así que estoy esperando para ver si puedo recuperar algo”, contó Eduardo. “El panorama en el barrio está raro. Hay mucha gente necesitada y otros oportunistas, antes esto no pasaba”, finalizó.