Jueves 10.2.2022
/Última actualización 11:48
Si usted está por salir desde Santa Fe de viaje de vacaciones y tiene hijos o hijas de hasta 12 años, bien sabrá que los menores deben ir ubicados en las comúnmente denominadas "sillitas", que en realidad se llaman sistemas de retención infantil (SRI). Y si a usted le importa la seguridad de sus hijos, deberá considerar que hay toda una metodología a seguir para sentarlos y ajustarlos correctamente.
Según datos nacionales, se estima que con los SRI la posibilidad de que bebés y niños sobrevivan sin secuelas a accidentes de tránsito es del 70%, mientras que en niños mayores ese número sube a 80%. Y hoy las rutas están agitadas: hay una gran masa de circulación vehicular por la temporada de verano, a lo que se suma el transporte de carga. Y siempre lo importante es llegar seguro a destino para no lamentar tragedias.
La física dice que todo cuerpo en movimiento va acumulando energía cinética y, ante una frenada o un impacto, ese cuerpo tiende a seguir en la misma dirección y misma velocidad hasta que algo lo detenga. Siguiendo este principio, entonces, todos los cuerpos que van dentro de un vehículo deben ir bien ajustados. Los adultos (conductor y acompañante) con los cinturones de seguridad, y los menores con los SRI.
Como los niños no son adultos en miniatura y los cinturones traseros no están adaptados para ellos, siempre deben ir ubicados en los sistemas de retención infantil. Primer punto muy importante: al comprar un SRI, debe constatarse que esté homologado internacionalmente. Eso debe figurar en la etiqueta que tiene el sistema.
Las homologaciones admitidas en la Argentina son: IRAM 3680-1 y 3680-2 (Argentina), FMVSS213 (Estados Unidos), UNECER44/04(Unión Europea), AS/NZS 1754 (Australia y Nueva Zelanda), INMETRONBR 14.400.
Por otro lado aparece el anclaje Isofix, un dispositivo clave que facilita la instalación de una sillita. Los SRI ya vienen con este elemento de sujeción, pero es necesario corroborar si el auto ya cuenta con los anclajes Isofix en los asientos traseros. Ello debe figurar en el manual del vehículo.
"Cada vez que un papá o una mamá vaya a adquirir un sistema de retención infantil para su hijo, tiene que ir con su hijo y con el auto, para que la persona que se lo va a vender vea el auto, y vea al chico. De esa manera adapta el SRI con el niño (por su peso y contextura) y con el auto", le explica a El Litoral Osvaldo Aymo, subsecretario de la Agencia Provincial de Seguridad Vial (APSV) y experto en la temática.
Archivo El Litoral Osvaldo Aymo, subsecretario de la Agencia Provincial de Seguridad Vial (APSV) y especialista en la temática.Osvaldo Aymo, subsecretario de la Agencia Provincial de Seguridad Vial (APSV) y especialista en la temática.Foto: Archivo El Litoral
Ahora bien: en ciudad, todo niño menor de 12 años debe ir en la plaza central del asiento trasero del vehículo. ¿Por qué? Por los toques o colisiones laterales, pues en las calles urbanas hay muchas intersecciones. En el centro, el niño va más seguro ya que está a mucha distancia de las puertas traseras.
"Pero hay un problema: esto no se puede hacer con todos los vehículos. Los cinturones de seguridad de muchos autos en la plaza central del asiento trasero son de dos puntos (cintura). Como los SRI deben ajustarse con un cinturón de seguridad de tres puntos, hay que decidir en qué lado de la plaza central va", dice Aymo.
En ciudad, el lugar más seguro para un niño que no puede ir en la plaza central trasera es detrás del acompañante, por tres cosas: "Primero, el menor se carga y descarga del lado de la vereda; segundo, con el espejo retrovisor central se ve al niño; y tercero, el conductor da la prioridad a la derecha. Pues si el menor se ajusta en su SRI detrás del conductor, éste debe depender de un tercero que dé prioridad a la derecha. Por otro lado, si el lugar de tránsito es la ruta, el SRI debe ir detrás del conductor: es el lugar más seguro para el menor", agrega el subsecretario.
Todo niño de cero a 4 años debe ir ajustado en el SRI mirando en contramarcha, es decir, mirando para atrás. "Porque la protección de la cabeza y de toda la columna cervical es muchísimo mayor. Esto fue inventado por los suecos, que están a la vanguardia en seguridad vial. Cada SRI tiene una ruta para cada cinturón de seguridad que permite ajustarse de este modo correctamente", dice el subsecretario.
Cómo están siendo los comportamientos sociales en las rutas provinciales y nacionales en plena temporada de vacaciones es otro de los interrogantes. Para Osvaldo Aymo, "cuando aumenta la carga vehicular, la posibilidad de siniestros viales pasa a ser muy elevada. Además, después de un año y medio de pandemia, salimos 'como locos' a la vida. Vemos mucho estrés, ira y ansiedad en los conductores, y esto preocupa", advierte.
Entonces, "bajar un cambio" es la clave, mucho más ante la responsabilidad de estar delante de un volante en la ruta y con toda la familia adentro. "El viaje de vacaciones empieza cuando cerrás la puerta de tu casa. Es muy recomendable organizar muy bien todo el trayecto a realizar, si es muy largo cada dos horas hacer un descanso, parando 20 minutos y tomando alguna infusión. Y 'resetear' el sistema nervioso, por favor. La gente debe entender que todo esto es para evitar tragedias", cierra el especialista.
La Agencia Provincial de Seguridad Vial (APSV) instaló un Punto de Información sobre traslado seguro de niños y niñas en vehículos en el Peaje de General Lagos de la Autopista Rosario - Buenos Aires. La acción se repite en cada cambio de quincena en los peajes de las rutas y autopistas. En los procedimientos, agentes de la Policía Vial detienen a los vehículos que viajan con menores y los apartan de la circulación; mientras, personal de la APSV observa las condiciones de traslado y brinda información. Si es necesario, sugiere a la familia modificar en el momento la manera en que viajan los menores, tal como cambiar la orientación de la butaca del sistema de retención infantil, ajustar correajes, etcétera.