Este miércoles 13 de septiembre se presentó la muestra “Desinteligencia Natural”, del artista plástico, tatuador y músico Leo Moscovich, en La Imprenta, Avenida Galicia 1206 de nuestra ciudad.
“Esta muestra es una vuelta a mis raíces, mi gran pasión que es el dibujo, que me acompaña desde muy temprana edad”, explica el artista.
Este miércoles 13 de septiembre se presentó la muestra “Desinteligencia Natural”, del artista plástico, tatuador y músico Leo Moscovich, en La Imprenta, Avenida Galicia 1206 de nuestra ciudad.
En un espacio industrial reformado, donde las protagonistas indiscutidas eran las obras de Moscovich, resaltadas con luces puntuales, numerosos asistentes se dieron cita para la noche inaugural.
La colección se compone de obras realizadas con técnicas mixtas sobre madera. El estilo personal que marca la impronta de sus tatuajes está presente en cada línea de sus pinturas.
Música, amigos y arte se complotaron para hacer de la primera muestra de Leo, un éxito.
Frente a un público realmente numeroso, un visiblemente emocionado Leo Moscovich tomó el micrófono para bromear con que iba a cantar, y para agradecer, en primera instancia, al artista plástico Ricardo Calanchini, sobre quien destacó “la predisposición para asesorar y aconsejar humilde y desinteresadamente a un amigo”. Agradeció también a los responsables del espacio La Imprenta y a todos los presentes.
Acerca de la propuesta, el artista conversó con El Litoral.
-¿Cómo surge la idea de la muestra?
-Tengo la suerte de haber transcurrido gran parte de mi vida dedicándome al arte. Soy músico, tatuador y dibujante por naturaleza. “Desinteligencia Natural” es mi primera muestra, un proyecto que comenzó a gestarse hace un tiempo, y hoy finalmente se concreta. Este conjunto de obras en técnica mixta sobre madera, es el resultado de un proceso que me llevó años de trabajo y estudio, desarrollando un estilo de dibujo con identidad propia y reconocible. Con el título “Desinteligencia Natural” pretendo, en un juego de palabras, reivindicar el proceso creativo, desde el nacimiento de una idea hasta el resultado final. Con todos los errores y el aprendizaje que dicho proceso conlleva, y con el valioso aporte de las emociones y vivencias, que también forman parte de lo que impulsa a una persona a crear algo.
-Contanos un poco acerca de las obras que integran la expo.
-Las composiciones están basadas principalmente en la estética del tatuaje, práctica que realizo hace casi tres décadas, dentro de los estilos clásicos como el tradicional, neotradicional y oriental, en los cuales la línea tiene un valor fundamental. En las obras se perciben también marcadas influencias del art nouveau, el comic, el imaginario del arte fantástico, la ilustración de ciencia ficción, y la cultura del heavy metal, música que me acompaña desde adolescente. Escenarios post apocalípticos que combinan elementos de la naturaleza con simbología mística, el contraste de la belleza con la oscuridad, la vida y la muerte, el erotismo y el misterio siempre están presentes.
-¿Cómo viviste la experiencia de tu primera muestra?
-Súper feliz, porque era una noche muy especial para mí, al ser mi primera vez que hago una muestra de arte. La convocatoria fue tremenda: familia, amigos mi barrio, porque este es el barrio donde yo me crié... Tantas cosas, tantas emociones, pero realmente sentí mucho cariño, respeto y apoyo de la gente. La pasé muy bien. Recién estoy cayendo de lo lindo que fue. Sentí muchísimo la buena energía. Debe ser que algo hice bien en todos estos añitos risas-. Me siento muy feliz y muy completo. Si el Leíto de 15 años hubiese podido ver que el leo de 50 vive de tatuar, pintar y hacer música, no lo creería.