Sábado 26.8.2023
/Última actualización 12:22
Yacaré Manso es el nombre artístico elegido por Rauly Martínez, músico argentino oriundo de Santo Tomé (Corrientes), radicado en Buenos Aires hace casi dos décadas. Este músico, productor y gestor cultural tiene ya siete discos editados y se consolidó como referente de la nueva canción litoraleña. En 2022, fue nominado a los Premios Gardel como “Mejor Disco De Chamamé” por su trabajo “YacaRock Nacional”, donde versionó con ritmos litoraleños clásicos del rock argentino junto a grandes figuras.
Grabó y compartió escenario con artistas como León Gieco, Ricardo Mollo, Loli Molina, Teresa Parodi, Javier Malosetti, Raly Barrionuevo, Hilda Lizarazu, entre otros. En 2023 cumple 25 años con la música y por ese motivo editó su séptimo disco “Eucalipto”, que está disponible en todas las plataformas digitales desde el 18 de agosto y será presentado “oficialmente” en pocas semanas.
Gentileza producción“El nombre de este disco es un viaje aromático a mi niñez, a los recuerdos del barrio estación de mi Santo Tomé, a aquellos vapores medicinales que nos hacía mi abuela en los inviernos litoraleños. Como con la música me suele pasar con algunas canciones, por ejemplo, cuando escucho Phil Collins, “In the air tonigth”, automáticamente me rememora el auto de mis tíos llevándome a la plazoleta del barrio o a la clásica heladería del pueblo. La música, los olores tienen ese poder de teletransportación a lugares mágicos, con el eucalipto me pasa lo mismo, todo es recuerdo, familia, amigos, paisaje, épocas que claramente no volverán, pero vivirán eternamente en mi memoria y en estas canciones”, afirmó en una entrevista.
-En este nuevo trabajo, experimentaste con una sonoridad diferente y fresca. ¿Cómo fue trabajar con Víctor Volpi en la producción y cómo crees que esto ha influido en el sonido final del álbum?
-Con Víctor hace un par de añitos venimos trabajando juntos, más que nada en el mezclado de artistas que voy produciendo. Él se encarga de hacer crecer lo que se genera en el estudio, no solamente en calidad de audio, sino aportando producción desde la mezcla. Con todo eso compartido, decidí hacerle la propuesta de hacer un disco juntos, un disco que yo tenía avanzado con una pre-producción hecha en mi estudio y que luego lo fuimos puliendo en el suyo. Víctor es una pieza fundamental en mi camino y en este disco quedó plasmado el gran equipo que somos dentro del estudio. Sin dudas el disco no tendría el concepto definido si no fuera por la manera que tiene de captar hacia a dónde quería yo llevar este eucalipto.
Gentileza producción-En estos 25 años de carrera, tu música abarcó diversos géneros y estilos. ¿Cómo describirías la evolución de tu sonido desde tus inicios hasta este último disco?
-Siempre intento divertirme con las herramientas a mano. Cuando lo que me rodea es más acústico, pues encaro por ese lado. Para “Eucalipto”, más allá de las guitarras criollas y eléctricas, de repente me encontré con un sintetizador en casa y un “octapad” (batería electrónica con diferentes sonidos) un regalo hermoso de Mariano Parisi un amigo muy querido quien fue mi primer baterista allá por 2009 en Quilmes. Con todos esos elementos fui construyendo capas que luego terminaron siendo la sonoridad elegida para estas nueve canciones que forman mi séptimo disco. Haciendo un repaso desde “La Corriente” hasta “Eucalipto” veo un lindo crecimiento, pero sobre todo lo que más rescato es me divierto en el estudio, y si tengo que volver a una sonoridad acústica, minimalista, no me hago problema alguno, lo importante es no perder el eje en las letras, seguir siempre la línea poética mía que es sobre todo mi sello personal.
-En el disco, cada canción suele tener su propia historia y significado. ¿Podrías elegir una de "Eucalipto" que sea especialmente significativa y compartirnos más sobre su origen y mensaje?
-Esa canción es “Empuja el sol”. Para mí es esperanzadora. La hice mirando el mar, desde una ventana, un día de lluvia. De repente un rayo de sol empuja entre las nubes negras y ese día melancólico cobró sentido. “Basta de grises, corran las nubes que empuja el sol y se abre el cielo. Brillan los mares, brillamos los dos”. Como dice el viejo dicho “el sol sale para todos”, después de la tormenta llega la calma.
-Sobre tu proceso creativo: ¿Cómo abordas la composición de tus canciones? ¿Tuviste algún enfoque particular o fuente de inspiración para las canciones en "Eucalipto"?
-En este disco, particularmente me dejé llevar por vivencias, sueños, aprendizajes, más que nada cuestiones emocionales experimentadas en este último año y medio. Iban surgiendo pequeños fragmentos como ejercicios de desahogo, que inclusive las iba compartiendo en mis redes. Luego me di cuenta de que, más que ejercicios eran posibles canciones, así que empecé a tomar esas referencias y volcarlas al proyecto en mi computadora. El enfoque estuvo en las herramientas que tenía a mano, como dije antes, esos instrumentos fueron suficiente para darle la textura al disco, sumado la experiencia de Víctor Volpi en producción logramos la corteza ideal para hacer sonar este eucalipto.
Foto: Leonardo Alegre-¿Qué planes tenés en mente después del lanzamiento de “Eucalipto” y la celebración de los 25 años? ¿Hay objetivos o proyectos que esperas realizar en los próximos años?
-El plan es disfrutar de lo que la música me siga acercando. De todas formas, ya estoy en el armado de nuevas canciones, nueva banda, giras. La música me mantiene activo, pero sobre todo me mantiene vivo y hoy más que nunca positivo y con ganas de seguir expandiendo este proyecto que lo sostengo (sostenemos entre muchos) hace 25 años. El único propósito es seguir sacando música, experimentando con sonidos, géneros que me gustan y dejé de lado por alguna u otra razón. Yo vengo del palo del rock, del funk, del reggae, y sobre esos estilos quiero volver a sumergirme.