La provincia de Santa Fe, a través del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, implementó este año 490 cursos de capacitación gratuitos, destinados a generar competencias y saberes para el mundo del trabajo.
A través del Ministerio de Trabajo, la gestión del gobernador Perotti implementó durante este año, 490 cursos de capacitación gratuitos destinados a generar competencias y saberes
La provincia de Santa Fe, a través del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, implementó este año 490 cursos de capacitación gratuitos, destinados a generar competencias y saberes para el mundo del trabajo.
Las temáticas ofertadas son muy diversas e incluyen formación en actividades agropecuarias, administración, construcción, cuidado de personas, empleo verde, computación e informática, diseño y confección de indumentaria, marketing y comunicación, oficios tradicionales (tales como herrería, pintura de obra, talabartería, carpintería, electricidad); y no tradicionales, como por ejemplo árbitro o profesor/a de fútbol.
Las propuestas, que se pusieron en marcha a lo largo de 2022, se distribuyeron en cuatro ciclos con inicios trimestrales y totalizaron 35.200 horas de cursado. En primer término, atravesaron un proceso de evaluación y selección a cargo de la Dirección Provincial de Formación y Capacitación Laboral. En los casos seleccionados, la provincia financia los honorarios de las y los capacitadores y el material que va a ser utilizado en los cursos. Para este año el monto total ejecutado asciende a más de 93 millones de pesos y se realiza a través de los programas Santa Fe Capacita y Futuras.
Las propuestas formativas son presentadas por organizaciones sociales, sindicales, educativas, empresariales, municipalidades, comunas y deben responder al diagnóstico realizado por cada una de ellas acerca de las habilidades requeridas por el mercado laboral local donde se van a dictar.
Desde el ministerio, se realiza el acompañamiento para que la elaboración de los distintos proyectos de capacitación, atienda las necesidades específicas de cada territorio, en función de la dinámica de la economía local; que estén orientados al segmento de población que necesita mejorar su empleabilidad o brinden posibilidades de autoempleo y que las y los capacitadores posean la trayectoria y experiencia para estar al frente de las propuestas.
Asimismo, se evalúa cuál es la modalidad óptima de cursado: si presencial, totalmente a distancia o un formato híbrido, de manera de garantizar el acceso desde distintas localidades, procurando que todos los departamentos del territorio provincial cuenten con ofertas interesantes.
“Poder ofrecer una oferta de capacitación tan variada para toda la provincia, que brinde herramientas de formación en oficios cruciales para el sostenimiento del entramado productivo y para mejorar las condiciones de acceso al empleo formal de santafesinas y santafesinos de cada rincón del territorio es el resultado de una gestión que entiende las prioridades y las pone en valor”, manifestó la directora del área Valeria March.
El total de inscriptos superó las 10.600 personas distribuidas en 90 localidades. “Los cursos no poseen restricción de edad ni ninguna otra característica demográfica ni de nivel educativo para inscribirse” aclaró March, “aunque hay algunas propuestas que han sido específicamente desarrollados para ciertos grupos, como los cursos sobre cuidado de personas, destinado al colectivo trans y LGTBQ+, o los que integran el Programa Futuras, orientado a mujeres jóvenes”. En este último caso, la capacitación constituye la primera fase de un proceso que puede culminar con la inserción laboral efectiva de las participantes.
El ministro de Trabajo, Juan Manuel Pusineri, remarcó que “en un contexto nacional complejo, los programas de formación laboral son herramientas que ponemos a disposición de las y los santafesinos a fin de mejorar sus capacidades de empleabilidad. Aún con las dificultades que conocemos a nivel país, como inflación y restricciones de divisas, en la provincia de Santa Fe hay sectores de actividad económica generando oferta de puestos de trabajo como por ejemplo el sector tecnológico, construcción o gastronomía”.
Por otro lado, Pusineri puso de manifiesto que “tanto el sector empresarial como el sindical nos vienen planteando la necesidad de contar con gente que tenga saberes incorporados. Lo estamos enfocando de dos maneras: por un lado, preguntándole a las empresas que identifiquen las necesidades y que se pongan en marcha las capacitaciones con financiamiento de la provincia. Y por otro lado encaramos iniciativas de formación –muchas de las cuales incluyen prácticas laborales- que tienen que ver con demandas transversales como manejo de software, que son habilidades solicitadas tanto por actividades industriales, comerciales o de servicios”.
“Es por ello que consideramos los programas de capacitación como políticas públicas esenciales que acompañan y estimulan la generación empleo calificado, y también expresan el compromiso que expresa el sector privado cuando se desarrollan herramientas que propician la inserción en puestos de trabajo de calidad”, concluyó el funcionario.
Además de las propuestas generales, el Ministerio de Trabajo lleva adelante un conjunto de iniciativas puntuales en asociación con otras áreas de gobierno, como los cursos de economía del conocimiento con perspectiva de género, organizados conjuntamente con los ministerios de Igualdad, Género y Diversidad, y de Producción, Ciencia y Tecnología.
El objetivo central de este programa es lograr la autonomía económica de mujeres y diversidades sexuales, reduciendo las desigualdades estructurales existentes en el acceso a derechos. Se busca generar herramientas para aumentar los conocimientos técnicos, habilidades y actitudes del talento local. A su vez, se incentiva a la articulación público-privada, incorporando al sector empresarial en los compromisos que ayuden a reducir brechas. Otro ejemplo son las capacitaciones en gestión cooperativa y en actividades agropecuarias también implementadas junto al Ministerio de Producción.