Suma críticas el no avance de obras en el Monumento: "Es el símbolo del abandono a Rosario"
“No sorprende, pero es indignante el destrato del gobierno nacional para uno de los lugares más emblemáticos de nuestro país”, dispararon desde el Concejo de Rosario.
Suma críticas el no avance de obras en el Monumento: "Es el símbolo del abandono a Rosario"
A más de 6 meses del anuncio público del gobierno nacional de que las obras en el Monumento Nacional a la Bandera de Rosario se llevarían adelante, no hubo adjudicación pese a haber dos oferentes en la licitación. “No sorprende, pero es indignante el destrato del gobierno nacional para uno de los lugares más emblemáticos de nuestro país”, disparó la concejala socialista, Verónica Irizar.
Resulta que después de siete años de anuncios consecutivos, el gobierno nacional finalmente confirmó en junio del año pasado la licitación de las obras que faltan para terminar la restauración del Monumento. Esto fue anunciado por el propio intendente de la ciudad, Pablo Javkin, quien se contactó con el ministro de Obras Públicas de la Nación, Gabriel Katopodis.
La noticia era rimbombante porque parecía se iba a concluir una saga de promesas iniciadas en 2015 por Cristina Fernández de Kirchner Cristina Fernández de Kirchner y continuada por Mauricio Macri y Alberto Fernández. Sin embargo, las obras se volvieron a caer por falta de adjudicación tal y como adelantó El Litoral.
Es que pese a haber dos empresas interesadas en llevar adelante la obra, el gobierno nacional no dio muestras de querer adjudicar y ya venció el plazo de garantía, aún con el compromiso de resolver la situación por parte de Alberto Fernández de avanzar a fines del año pasado.
“Ni inversión en seguridad ni en obras emblemáticas como estas. El destrato de Nación hacia Rosario es evidente”, sostuvo Irizar, que realizó un pedido formal para la reactivación del proyecto.
Cumplido ya el plazo previsto sobre fines de septiembre, una empresa rosarina y otra bonaerense se mostraron interesadas y participaron de la licitación pública, pero pese a ello la administración encabezada por Fernández “no dio muestras de querer avanzar seriamente”.
“Pedimos encarecidamente que por una vez demuestren que no consideran a Rosario un botín para años electorales, y cumplan con la palabra empeñada. Es el monumento más importante a nivel nacional y por tercera vez están incumpliendo con una reforma necesaria y urgente”, añadió Irizar.
“Esto ya lo vivimos en la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner y luego con Mauricio Macri. El resultado parece ser el mismo: promesas y falta de concreción. Necesitamos mayor vehemencia para reclamar por parte de los gobernantes, que todos defendamos a la ciudad que necesita no solo de esta obra que es para todo el país, sino mucha mayor inversión en obra pública, en seguridad, en infraestructura”, sostuvo la concejala.
A su vez, recordó que durante el 2022 Santa Fe estuvo entre las provincias con menor inversión en materia de obra pública, quedando antepenúltima en el escalafón. “Damos mucho y no recibimos casi nada. El Presidente nos dijo en la cara que iba a hacer del federalismo su bandera y lo que se percibe es una visión cada vez más unitaria, enfrascada en una interna dentro del peronismo y que está cada vez más lejos de resolver los problemas de Argentina y particularmente de nuestra ciudad”, cerró Irizar.
La agotadora espera
Después de un tortuoso recorrido durante el gobierno de Macri en que finalmente las obras encaradas quedaron inconclusas, se rearmó una licitación con las tareas esenciales de conservación y puesta en valor para completar lo que nunca se hizo. Así, se llega al año pasado, con un llamado a licitación que apuntaba a arreglar la fuente de la proa del Monumento, limpiar los mármoles, entre otros trabajos de conservación y puesta en valor.
El lunes 26 de septiembre de 2022, se cumplió el plazo previsto para que las empresas presentaran propuestas y se abrieron los sobres. Dos firmas cotizaron: la rosarina DyScon S.A y la bonaerense Cocivial. En los dos casos, las ofertas casi duplicaban el presupuesto original, que era de 527.441.563,13.
El cálculo de Nación era de julio y la inflación disparada explica las ofertas de las dos empresas participantes. En lo económico, DyScon corre con una pequeña ventaja ya que su propuesta, $967.531.342,30, es inferior a los $1.024.202.864,95 que pidió la firma bonaerense para llevar adelante la obra.
Así es que, además de postergar una vez más -y van- las refacciones que ya son una deuda de Nación con Rosario y con su principal monumento, la caída de la licitación perjudica a la empresa santafesina, mejor posicionada, y eventualmente, a la contratación de mano de obra local.
Hacia fin del año pasado, y ante la demora en adjudicar, tanto el gobernador de la provincia, Omar Perotti; como el intendente de Rosario, Pablo Javkin; mantuvieron conversaciones con el ministro de Obras Públicas de la Nación, Gabriel Katopodis. Había un compromiso de adjudicar igual las obras, a pesar de que las ofertas eran altas, entendiendo que la inflación dejaba desfasado completamente el medio millón de pesos del presupuesto oficial. Pero no sucedió.
Pasó fin de año y no hubo ni hay novedades. Y todo parece indicar que, como sucedió con otras obras nacionales (una de las más notorias, la malograda transformación en autovía del sureño tramo santafesino de la ruta nacional 33), finalmente caerá también la restauración del Monumento a la Bandera.