Este miércoles, la Policía Federal Argentina (PFA) realizó 17 allanamientos simultáneos en distintos puntos de la ciudad de Santa Fe en el marco de una investigación por lavado de activos. Los procedimientos están vinculados a una organización narco que operaba desde 2023 y cuyo principal sospechoso es un santafesino que, tras dedicarse al tráfico de drogas, transformó su actividad en un negocio inmobiliario.
La investigación está encabezada por el fiscal Walter Rodríguez, quien coordina un equipo de la PFA proveniente de Buenos Aires. Según trascendió, el imputado utilizaba las ganancias obtenidas de la venta de estupefacientes para adquirir propiedades y vehículos. Las viviendas y locales comerciales eran luego puestos en alquiler, generando una fachada empresarial para ocultar el origen ilícito de los fondos.
El detenido es señalado como jefe de una organización narco que operaba principalmente en los barrios Centenario, Chalet, Arroyo Leyes, Fonavi y Santo Tomé.
En los allanamientos realizados, la Policía Federal logró identificar y secuestrar propiedades y vehículos. Se calcula que el acusado poseía al menos 17 inmuebles, entre casas y locales comerciales, muchos de ellos ubicados en la zona norte de la ciudad. También se registraron inmuebles en Santo Tomé y San José del Rincón.
Uno de los allanamientos tuvo lugar en un domicilio de calle Doldán al 6700, donde los efectivos buscaron indicios vinculados a la causa.
Calle Doldán al 6900.
Además, se realizaron operativos para localizar 11 vehículos, entre autos y camionetas, que presuntamente estaban siendo utilizados por la organización delictiva. No se descarta la existencia de más bienes de lujo, como lanchas, que también habrían sido adquiridas con dinero proveniente del narcotráfico.
La causa que motivó estos operativos tiene sus raíces en una detención realizada en 2023, cuando se incautaron 29 kilos de cocaína en un operativo en barrio Centenario, lo que permitió identificar al líder de la organización. Desde entonces, la investigación se ha centrado en rastrear los activos obtenidos por esta red criminal.
Un grupo de policías de Buenos Aires, son quienes estarían a cargo de coordinar la logística de los operativos policiales. El despliegue de las fuerzas federales en Santa Fe se realiza bajo la premisa de desarticular la red de lavado de dinero construida sobre el tráfico de drogas.
Las autoridades continúan investigando la magnitud del entramado financiero que sostenía la actividad narco del acusado, quien, según se presume, habría utilizado su red de propiedades como un mecanismo para blanquear las ganancias obtenidas del narcotráfico.