Agustina Mai
amai@ellitoral.com
Ya se ocupó la mitad de las 11 hectáreas y en Santa Fe no hay otro terreno disponible para depósito de basura.
Agustina Mai
amai@ellitoral.com
A cinco años y medio de la inauguración del relleno sanitario a la vera de la Circunvalación Oeste, su ritmo de ocupación es acorde con la planificación originaria: ya pasó un poco más de la mitad de su vida útil -estimada en 10 años- y se ocupó el 50 % de las 11 hectáreas destinadas a la basura. “Este complejo fue diseñado para depositar 1,5 millones de toneladas de residuos y a la fecha llegamos justo a la mitad: 755.064 toneladas, cuando estamos a cuatro años y medio de finalización del contrato de concesión”, precisó el subsecretario de Ambiente de la Municipalidad, Roberto Celano, en una recorrido con El Litoral por el relleno sanitario.
Mensualmente, ingresan entre 10.000 y 12.000 toneladas de basura, discriminadas del siguiente modo: entre 6.000 y 7.000 toneladas de residuos domiciliarios, 3.000 toneladas del barrido y limpieza de las calles, 2.000 toneladas de empresas que ofrecen contenedores, 1.300 toneladas correspondientes a los servicios municipales y cerca de 800 toneladas de la limpieza de los minibasurales.
Actualmente otras cuatro localidades del departamento La Capital arrojan su basura en el relleno sanitario: Monte Vera, Sauce Viejo, San José del Rincón y Arroyo Leyes.
— ¿Hay posibilidades de extender la vida útil del relleno? -consultó El Litoral.
— Podría extenderse uno o dos años si se avanza en la recuperación de materiales reciclables y en la creación de una planta mecánica de compostaje - respondió el funcionario.
Desde el Municipio están buscando otras alternativas, ya que “Santa Fe no va a tener otro lugar como relleno sanitario”, aseguró Celano.
Entre las posibilidades, existen en el país algunas fábricas de maquinarias para transformar los residuos en energía, combustible u otros materiales, por ejemplo piedras para pavimentación. Uno de los proyectos es capturar los gases que se generan en el relleno para transformarlos en energía. “La CAF financió el estudio de factibilidad y los resultados fueron positivos. Ahora estamos buscando privados interesados en la captación de estos gases”, comentó Celano.
Por otra parte se está trabajando en la iniciativa para instalar una planta de compostaje dentro del complejo ambiental (hay 3 hectáreas reservadas para tal fin). “También estamos fomentando la práctica del compostaje entre los vecinos -en el Mercado Norte- porque permite reducir notablemente la cantidad de residuos”, indicó.
Vivir de la basura
De los más de 10 millones de kilos que ingresan mensualmente al relleno, se recuperan unos 60.000 kilos de material reciclable (un 0,6 %). Durante la última quincena, los 96 miembros de la asociación civil Dignidad y Vida Sana que trabajan en la Planta de Reciclado vendieron 14.000 kilos de cartón, 8.500 kg de vidrio, 3.980 kg de papel, 3.200 kg de plástico y 214 kg de metal por un total de .828: cada uno cobró 0 por 15 días de trabajo.
Hace tres meses que la selección de la basura la realizan manualmente porque la cinta mecánica no funciona por problemas técnicos. Recientemente el municipio gastó 100.000 pesos para comprar un nuevo “pulpo”, una pinza gigante que toma la basura y la traslada hasta la cinta transportadora.
Cuando El Litoral recorrió la Planta de Reciclado estaban haciendo las pruebas para poner el sistema nuevamente en funcionamiento, en medio de un desorden generalizado: decenas de recicladores circulaban por la planta, entre bolsas de basura, abriéndolas y sacando lo que sirve para vender. “Se pierde mucho tiempo haciendo la selección a mano. Todo el trabajo se hace a pulmón”, comentó Susana Aboli, la flamante presidenta de la asociación Dignidad y Vida Sana.
— ¿Cómo llega la basura los días de los residuos secos? -les preguntó El Litoral.
— Muy mezclada. Los martes y viernes (porque la basura seca se saca lunes y jueves) ingresan cuatro o cinco camiones que vienen del macrocentro. Pero ni siquiera esos días la basura llega diferenciada -respondió Ramón Gómez, miembro de la asociación.
— La basura no es buena. Si comparamos los camiones de Santa Fe con los de otros lugares, como Monte Vera, es impresionante la diferencia de la calidad - concluyó Aboli.