(Enviado Especial a Doha, Qatar)
En el homenaje a Pelé, que no tuvo presencia de ex jugadores brasileños, el máximo dirigente de la Conmebol habló del equipo de Scaloni y su sueño de que llegue a lo más alto.
(Enviado Especial a Doha, Qatar)
En el centro mismo de Souk Wakif se encuentra la sede de la Conmebol en Doha. Se jactan ya de que 85.000 personas han visitado ese lugar. Es imposible no encontrarse con ese espacio si se camina por las calles del viejo mercado qatarí. Y uno de los principales objetivos fue el de homenajear a Maradona y a Pelé. El de Diego, populoso, se hizo el 25 de noviembre, justamente cuando se cumplió el segundo año de su muerte. Pelé está luchando por su vida y el día elegido fue este domingo que amaneció soleado pero fresco en Doha. Y no tuvo la misma repercusión. Inclusive, con nula presencia de los muchos ex jugadores brasileños que están en esta ciudad, muchos de ellos (la mayoría), con compromisos laborales con distintas cadenas periodísticas. Se nota que la eliminación brasileña a manos de Qatar hizo que las ganas de mostrarse en un acto público, más allá de tratarse del propio Pelé, desaparecieron con la derrota por penales del viernes pasado ante Croacia.
Tanto fue así que además de Alejandro Domínguez, presidente de la Conmebol, el que hizo uso de la palabra fue un argentino (Javier Zanetti), quien obviamente dijo haberlo conocido y hablar a menudo con él, manifestando el respeto que es universal por su figura, pero hubiese sido otra cosa si alguno de los brasileños invitados se hacía presente y hablaba en nombre del fútbol de su país, por el que tanto hizo Pelé, campeón del mundo en 1958, 1962 y 1970.
Alejandro Domínguez no dejó, en ningún momento, de manifestar su enorme alegría por la clasificación de Argentina para las semifinales de este Mundial. Era una “deuda” que el fútbol sudamericano estaba necesitando pagar.
-Presidente, ¿qué fue Pelé para usted?
-Lo mínimo que podíamos hacer desde la Conmebol es este reconocimiento para alguien que hizo mucho por el fútbol sudamericano, que nos enseñó el rol del número 10, que a través del jogo bonito hizo gala de una gran virtud: jugar en equipo y no por sí o para sí mismo. Le deseamos larga vida en este momento difícil y le seguiremos enseñando a todas las generaciones quién fue este hombre y qué hizo por el fútbol.
-Se abrió un expediente en Fifa por los hechos ocurridos en el partido entre Argentina y Países Bajos. ¿Qué opinión tiene al respecto?
-Sobre el expediente no voy a opinar, porque es algo disciplinario y hay que esperar simplemente el resultado. Sobre lo otro, es lógico que se juegue con intensidad y pasión un partido de esta naturaleza y en cuartos de final. No me sorprende lo que pasó.
-¿Qué puede pasar?
-¿Qué puede pasar?, que ganó Argentina.
-¿Siente interiormente una satisfacción porque un país sudamericano se haya metido entre los cuatro mejores del mundo?
-Argentina se convirtió en el equipo del resto del mundo. Todos los que no tienen su país disputando esta instancia, se sienten hinchas de Argentina. De hecho, leí en un diario importante de Brasil que el 40 por ciento de los brasileños, si no salía campeón Brasil, querían que saliera Argentina. Eso habla a las claras de lo que estoy diciendo.
-¿Qué le parece la marcha del Mundial?
-Extraordinario en todo. Me gusta el nivel de juego y también me gusta la organización. Para Qatar no caben más que felicitaciones.
-Qatar organizó el Mundial en 70 kilómetros a la redonda. ¿Es un ejemplo a imitar para el futuro?
-Nosotros estamos detrás de la organización del Mundial de 2030 en cuatro países, que son Argentina, Chile, Uruguay y Paraguay. Nos mantenemos firmes con ese propósito y consideramos que no será un estorbo porque es fácil la accesibilidad de país en país. En cuanto al comienzo de las Eliminatorias para el Mundial de 2026, no se sabe cuándo comienza porque, en realidad, está dentro de la órbita de Fifa y no de Conmebol. Muchos equipos se rearman luego de un Mundial, cambian entrenadores y jugadores. Cuando los 10 presidentes de las federaciones se pongan de acuerdo, arrancarán. Se hablaba de marzo, pero no está definido concretamente.