No se vislumbran modificaciones en los equipos para el gran partido del sábado. Por allí, la recuperación de Luna Diale lo pondría en carrera en Unión. Falcioni encontró un rendimiento mejorado en Lanús.
Por ahora son sensaciones, pero hay dos cuestiones en las que Falcioni y Munúa, sin quererlo ni buscarlo, van a coincidir: 1) los esquemas tácticos con los que saldrán a jugar el clásico; 2) los retoques en la formación, si los hay, serán mínimos. Falcioni tocó lo que debía tocar después del mal partido ante Tigre y pudo mejorar la producción de su equipo; con Munúa, pasó lo mismo y entre cambios obligados y retornos, armó un equipo que también funcionó.
¿Cuál es el panorama de Falcioni?, encontró respuestas con la línea de tres atrás y la mayor población en la mitad de la cancha, aún dejando afuera del equipo a un jugador que parecía incapaz de perder la titularidad, como Facundo Farías. No le tembló el pulso a Falcioni, lo sacó, mantuvo a Beltrán (autor del gol) y armó un equipo sin la presencia de algunos jugadores que todavía no demostraron lo que deben para asegurarse un lugar en el equipo, caso Novillo y Sandoval. El retorno a la línea de tres con Garcés, Goltz y Delgado (ocupantes de esos puestos y en ese esquema durante la exitosa Copa de la Liga del año pasado), más un funcionamiento que todavía tiene resabios de lo que supo imponer Domínguez, más allá de que hay jugadores (caso Castro, por ejemplo) que ya no están, fueron aportes sanadores ante Lanús, luego de un paso atrás en todo aspecto frente a Tigre.
¿Cuál es el panorama de Munúa?, el acomodamiento de la defensa al corrimiento de Brítez, la aparición de Polenta en la titularidad y la vuelta de Corvalán, más este muy buen momento de Franco Calderón (uno de los cinco jugadores que amplió su contrato, junto con Vera, Machuca, Esquivel y Corvalán), hicieron que Unión tenga un rendimiento defensivo sólido. La única duda se podría plantear arriba, porque si la recuperación de Luna Diale sigue en forma progresiva y brindando signos claros de mejoría, podría ser el encargado de volver a la titularidad para suplantar a Peralta Bauer, que lo hizo bien ante Banfield, obligando a un mal rechazo de Lollo para convertir el segundo gol en la espléndida tarde de domingo en el 15 de Abril.
¿Cuántos cambios haría Falcioni?, ninguno o, a lo sumo, uno. ¿Cuántos cambios haría Munúa?, lo mismo, ninguno o a lo sumo uno. Quizás Munúa con mayor satisfacción en cuanto al rendimiento de su equipo porque no tuvo que cambiar esquema para mejorarlo, y la vez que quiso hacer algo distinto (ante Sarmiento de Junín), con la posición de algunos jugadores, no le salió bien y recogió el guante, volviendo a fojas cero. Falcioni, en cambio, no pudo escapar a la lógica tentación -que cualquiera la habrá tenido- de "tirar toda la carne al asador" y jugar con tres delanteros. Al tener en el equipo a jugadores como el Pulga Rodríguez, Farías, Wanchope Abila (todavía sin chances de ser titular en la Copa de la Liga, aunque sí por Copa Argentina) y Beltrán (de buen presente), es inevitable que haya querido aprovechar todo el potencial. Pero se dio cuenta de que eso desbalanceaba al equipo en algunos sectores de la cancha, máxime con un momento de algunos jugadores que no es el mejor o el que alguna vez pudieron demostrar, como está ocurriendo, por ejemplo, con Federico Lértora.
Entonces, la continuidad del equipo por el lado de Colón es una posibilidad muy concreta que tiene el técnico sabalero para encarar el clásico. Y casi lo mismo pasa del otro lado, con un Munúa que recupera a Brítez (tuvo un esguince que no le impedirá jugar) y que deberá evaluar la conveniencia de meter desde el arranque a Luna Diale, quien se lesionó en el partido ante los tucumanos y ya se cumplieron los tiempos de curación del desgarro que lo marginó por algunos partidos. Si no vuelve Luna Diale entre los titulares, casi seguro que mantendrá a Peralta Bauer, más útil en esa posición de segundo punta (o media punta) que Leonardo Ramos, un jugador distinto, con más perfil de centrodelantero y más parecido a Jonatan Álvez. En ese aspecto, se convenció Munúa, casi con seguridad, que necesita a alguien distinto al lado de Álvez. "Con Ramos y Álvez tengo 300 goles", dijo el uruguayo luego de la victoria ante Platense. También es una tentación poner a dos goleadores en la cancha, pero si eso no se trasluce en la red rival deja de ser efectivo y puede convertirse en algo no beneficioso para el equipo. Incluso, en un Unión que tiene un juego profundo por los laterales y que podría aprovechar mejor o favorecer la postura de jugar con dos "9". ¿Vera?, ¿Roldán?, parecen estar un escalón debajo de Luna Diale en la recuperación, así que deberán esperar el partido con Patronato para entrar en la consideración del técnico.
Falcioni quiere entrenar en su estadio y no está nada mal. Ya quiso hacerlo la semana pasada, pero las lluvias se lo impidieron. Todavía el campo de juego no está lo suficientemente firme como para ser sometido a un entrenamiento con el piso barroso o pesado. Pero esta semana, ya sea miércoles o jueves, la posibilidad y la intención del DT es concreta. Munúa no variará demasiado el calendario de prácticas, aunque anda con ganas de concentrar a su equipo en el mediodía del viernes, luego del entrenamiento matutino, para favorecer el descanso y también la alimentación. Máxime para un equipo -el suyo- que derrocha energía.
Reserva
Este jueves a las 11 se jugará el partido de reserva, que tendrá lugar en el predio rojinegro. El árbitro del partido será Julián Jerez. No es buena la actuación que vienen teniendo los equipos de Santa Fe. En la zona 1, Unión está décimo con 5 puntos, mientras que Colón, en la zona 2, está duodécimo con 7 puntos, sobre 6 partidos jugados por ambos.