Viernes 18.3.2022
/Última actualización 18:47
El presidente de España, Pedro Sánchez, ha admitido en una carta enviada al rey Mohamed VI que el plan de una autonomía para el Sáhara Occidental, presentado por Marruecos en 2007, es la iniciativa más "más seria, realista y creíble” para resolver el conflicto, según ha publicado el ministerio de Exteriores marroquí a través de un comunicado en su página web en el que anuncia el cambio de posición de España.
Desde el Gobierno han confirmado los términos de la misiva asegurando que "hoy iniciamos una nueva etapa de la relación con Marruecos basada en el respeto mutuo, el cumplimiento de los acuerdos, la ausencia de acciones unilaterales y la transparencia y comunicación permanente". Todo ello, según se concluye, para garantizar la "estabilidad, la soberanía, la integridad territorial y la prosperidad de nuestros dos países".
Pedro Sánchez visitará Rabat antes de final de mes para ratificar el desarrollo de esta hoja de ruta que, según fuentes del Ejecutivo, supone el inicio de una nueva etapa para superar el conflicto diplomático. Esto es, "afrontar juntos los desafíos comunes, especialmente la cooperación en la gestión de los flujos migratorios en el Mediterráneo y en el Atlántico, actuando siempre con un espíritu de total cooperación, y restablecer la plena normalidad en la circulación de personas y bienes, en beneficio de nuestros pueblos".
La crisis bilateral entre ambos países se inició hace ya quince meses por la acogida del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, y al aplazarse la cumbre prevista entre ambos gobiernos. El conflicto se agudizó el pasado mes de mayo con la entrada masiva de miles de inmigrantes irregulares, muchos de ellos menores, en Ceuta y Melilla. A principios de este mismo mes de marzo se produjo el mayor intento de salto a la valla de Melilla protagonizado por 2.500 personas.
“Nuestro objetivo es construir una nueva relación, basada en la transparencia y la comunicación permanente, el respeto mutuo y los acuerdos firmados por ambas partes y absteniéndose de cualquier actuación unilateral, estando a la altura de la importancia de todo lo que compartimos”, escribe Pedro Sánchez en su misiva, cuyo contenido pudo confirmar El Confidencial. El cambio de posición, que podría reconducir la crisis diplomática entre ambos países, se produce en medio del contexto bélico en Ucrania, cuando la UE tiene todas sus miradas puestas en la frontera Este.
"Todas estas acciones se llevarán a cabo con el objetivo de garantizar la estabilidad y la integridad territorial de los dos países"
Blindar la frontera Sur es para España una prioridad de primer orden ante la amenaza de Marruecos. De hecho, en la misiva, según las fuentes marroquíes, se señala "determinación para afrontar juntos los desafíos comunes, especialmente la cooperación de la gestión de los flujos migratorios en el Mediterráneo y el Atlántico, con un espíritu de total cooperación". En los dos primeros meses del año, la inmigración irregular a Canarias aumentó un 135% y va camino de batir récords.
"Todas estas acciones se llevarán a cabo con el objetivo de garantizar la estabilidad y la integridad territorial de los dos países", concluye el presidente del Gobierno en su mensaje, según las mismas fuentes marroquíes que han distribuido la misiva. Marruecos retiró a su embajadora de Madrid, Karima Benyaich, en mayo del pasado año.
El titular de Exteriores, José Manuel Albares, que heredó esta crisis bilateral de su predecesora Arancha González Laya, venía repitiendo desde hace unas semanas su convencimiento de que se verían "muy pronto" resultados en la resolución del conflicto diplomático con Marruecos. Este mismo viernes, en una entrevista en El Confidencial que viene manteniendo "una relación fluida con mi homólogo [marroquí] y estamos intentando construir una relación del siglo XXI, donde la posibilidad de crisis quede atrás".
De confirmarse la posición de España, trasladada por la diplomacia de Marruecos, se produciría un giro histórico en la posición respecto al Sahara. Hasta ahora, el Gobierno se ha ceñido a las resoluciones del Consejo de Seguridad y a lo dispuesto en la Carta de Naciones Unidas abogando por un referéndum de autodeterminación.
El delegado del Frente Polisario en España, Abdulah Arabi, ha reaccionado al contenido de la misiva, en declaraciones a Europa Press, lamentado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, "sucumbe ante la presión y el chantaje" de Marruecos como "peaje" para retomar las dañadas relaciones políticas y diplomáticas entre ambos países. El reconocimiento de la autonomía evidenciaría, según el Frente Polisario, la "hipocresía" del Gobierno cuando habla de "defender la legalidad internacional".
Oposición de los socios de Gobierno
Fuentes de Podemos han mostrado su oposición a la propuesta realizada por el jefe del Ejecutivo criticando que el plan autonomista que defiende Rabat "supone abandonar la posición de neutralidad y el consenso de las resoluciones de Naciones Unidas". Además, subrayan desde el partido morado que "se trata de una postura con la que se rechazaría de facto el 'mutuo acuerdo', ya que ni el Polisario ni Argelia aceptarían esta solución".
Desde Podemos defienden, según estas mismas fuentes, que la única solución pasa por "implementar el derecho internacional y las resoluciones de las Naciones Unidas, que señalan la necesidad de celebrar un referéndum y de respetar la libre determinación del pueblo saharaui". La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha reafirmado a través de las redes sociales su compromiso "con la defensa del pueblo saharaui y con las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas".
En la misma línea que Podemos, Díaz ha sostenido, en contra del criterio del Ejecutivo, que "toda solución al conflicto debe pasar por el diálogo y el respeto a la voluntad democrática del pueblo saharaui". A pesar de que la política exterior la marca el presidente del Gobierno, y la líder del sector de Unidas Podemos siempre lo ha respetado, en esta ocasión ha avanzado que "seguiré trabajando en eso", manifestando así su oposición en este giro histórico de la diplomacia española.