Atentado en los Tribunales Federales: nuevo operativo con el "Brujo" Ungaro en la mira
El autor material de la balacera, aprehendido tiempo atrás, había mantenido comunicaciones con el capo mafioso que está preso en una cárcel de Chubut. Los investigadores sostienen que fue el instigador.
Atentado en los Tribunales Federales: nuevo operativo con el "Brujo" Ungaro en la mira
Agentes federales de la División Unidad de Investigación Antiterrorista realizó una serie de allanamientos en el marco de la investigación que se lleva adelante por la balacera perpetrada el 28 de septiembre pasado a la sede de los Tribunales Federales de Rosario.
Tras la aprehensión del autor material de los disparos, el 12 de Octubre pasado, los detectives procedieron a efectuar un minucioso análisis de la información contenida en su teléfono celular. Así, pudieron determinar que él mismo había mantenido una cantidad considerable de comunicaciones con René Daniel Ungaro, conocido como "El Brujo", quien se encuentra detenido en la Unidad 6 del Servicio Penitenciario Federal de Rawson.
Este capo mafioso contó con la colaboración de un joven vendedor y reparador clandestino de teléfonos celulares de dudosa procedencia, quien -una vez cometido el atentado- le cambió su aparato por otro nuevo con un chip prepago para ocultar su accionar, sostuvieron fuentes de la fuerza nacional.
Con las pruebas aportadas por los investigadores, el Juzgado Federal Nro. 4 del Dr. Marcelo Martín Bailaque; Secretaría Nro. 2 a cargo de la Dra. María Gastellu, dispuso llevar acabo 3 allanamientos simultáneos en la calle Sánchez de Thomson al 200, domicilio de la madre y varios parientes de Ungaro, en Isola al 100 donde se ubica una vivienda y un local precario de venta de teléfonos celulares y en la celda del "Brujo".
Cómo resultado de los procedimientos se logró la detención de un hombre y el secuestro de una pistola Bersa calibre 9 mm, veintinueve cartuchos a bala del mismo calibre, mas de cien teléfonos celulares de distintas marcas y modelos, algunos de alta gama (varios de ellos con pedido de secuestro por robo).
Un joven vendedor y reparador clandestino de teléfonos celulares de dudosa procedencia, quien -una vez cometido el atentado- le cambió su aparato por otro nuevo con un chip prepago para ocultar su accionar
El detenido, argentino de 28 años de edad, quedo a disposición del magistrado interventor.