Martes 27.4.2021
/Última actualización 4:06
Una fiesta electrónica clandestina que se realizaba en un hostel de Palermo fue desarticulada por personal de la Policía de la Ciudad y como saldo cinco personas fueron detenidas, al tiempo que a otras 27 se les inició causa judicial por incumplir normas contra la pandemia por coronavirus.
El hecho ocurrió en las últimas horas cuando efectivos de la comisaría vecinal 14 A se desplazaron hasta ese lugar ubicado en Guatemala al 4100 por denuncias sobre música a alto volumen.
Cuando los oficiales ingresaron al lugar encontraron a decenas de personas realizando una fiesta electrónica, incumpliendo el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 241/2021 que impone restricciones por la pandemia por coronavirus.
En el marco de la inspección, dos hombres mayores de edad intentaron obstaculizar el procedimiento con improperios y obstaculizando el paso, por lo cual fueron detenidos por violación al artículo 239 del Código Penal.
La Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas 2, a cargo de Mauro Tereszko, dispuso, además la detención del encargado del hostel y otros dos hombres que organizaron el evento, en violación al DNU, la clausura del lugar e implementar consigna, y labrar acta por infracción al Artículo 89 del Código Contravencional de la Ciudad sobre ruidos molestos.
El magistrado también determinó que se identifique a otras 27 personas, a las que se les labró acta de infracción al artículo 205 del Código Penal, por violar medidas destinadas a impedir la propagación de epidemias.
Asimismo, cuatro de los cinco detenidos (sin antecedentes penales) recuperaron su libertad y deberán cumplir una probation de 60 horas de trabajo de utilidad pública en centros comunitarios de la Capital Federal, abandono de los efectos del delito (equipos de música, amplificadores, y otros) y cursos de convivencia urbana a rendir en el transcurso de un año ante la Secretaría de Derechos Humanos del Gobierno porteño, no podrán cambiar de domicilio ni salir del país sin permiso Judicial (ellos son barman, disc jockey y un socio gerente).
En tanto, por el quinto detenido aún se evalúa su libertad, pero quedó procesado por ambos delitos y se solicitará un juicio oral para la imposición de una condena (puede llegar hasta los 4 años de prisión), ya que tenía antecedentes penales por robo automotor y otros delitos contra la propiedad (es uno de los encargados del hostel).
Intervino también la Agencia Gubernamental de Control (AGC) para evaluar la clausura administrativa del hostel.