Miércoles 15.7.2020
/Última actualización 19:05
El presidente de EE.UU., Donald Trump, anunció este martes que ha firmado un decreto que pone fin al trato económico y comercial especial que su Gobierno daba a Hong Kong, además de una ley por la que impondrá nuevas sanciones a China por haber "extinguido la libertad" de esa ciudad semiautónoma.
"He firmado un decreto que pone fin al trato preferencial de Estados Unidos hacia Hong Kong. Ahora les trataremos igual que a la China continental", dijo Trump en una conferencia de prensa en la Casa Blanca.
"No tendrán privilegios especiales, no tendrán un trato económico especial ni podrán exportarnos tecnologías delicadas. Además, ya saben que hemos puesto aranceles masivos a China", recordó, insinuando que esas tasas se aplicarán también a los productos procedentes de Hong Kong.
El decreto de Trump supone un paso más respecto a su anuncio de mayo, cuando el mandatario ya ordenó a su Gobierno reducir al mínimo el trato preferencial que da a Hong Kong, un estatus que contribuyó a que esa antigua colonia británica se convirtiera en centro financiero global a lo largo de las dos últimas décadas.
Imagen ilustrativaLa medida forma parte de las represalias de Washington por la aprobación de la controvertida ley de seguridad nacional sobre Hong Kong, que busca prohibir todo acto de "subversión contra el Gobierno" central chino en la ciudad semiautónoma y que Trump considera una vía para "oprimir" a ese territorio.
"Hoy he firmado una ley que me da herramientas nuevas y poderosas para que rindan cuentas aquellas personas y entidades implicadas en la extinción de la libertad de Hong Kong", subrayó el mandatario.
Se refería a la Ley de la Autonomía de Hong Kong, aprobada recientemente por el Congreso y que permite al Gobierno de Trump imponer sanciones contra personas y bancos extranjeros que hayan contribuido a la presunta erosión de la autonomía de ese territorio.
"(Hong Kong) ya no va a poder competir con los mercados libres. Sospecho que mucha gente va a abandonar Hong Kong, y tendremos más volumen de negocio (en EE.UU.) gracias a eso, porque acabamos de perder a un gran competidor", opinó Trump.
El anuncio de Trump llegó horas después de que China anunciara sanciones a la empresa armamentística de origen estadounidense Lockheed Martin, y en plena escalada de tensiones con Pekín por Hong Kong, la pandemia del COVID-19 y otros temas.
Su rueda de prensa se convirtió rápidamente en un largo mitin, en el que se dedicó a comentar una por una las promesas electorales del virtual candidato demócrata en las elecciones de noviembre en EE.UU., el exvicepresidente Joe Biden.
Trump aseguró que la carrera de Biden "ha sido un regalo a los chinos" y volvió a pronosticar que, si llega al poder, aplicará una "ideología" propia de Venezuela y abrirá las fronteras de EE.UU. a "criminales" con unas políticas migratorias laxas.
"Todas las personas de Sudamérica van a entrar aquí, todas las personas de cada país van a entrar aquí", advirtió, con un tono apocalíptico.
Trump, cuya campaña está preocupada por el avance en algunas encuestas de Biden, pareció querer contrarrestar así la atención mediática que había acaparado su rival, que este martes presentó un plan energético.